El voleibol femenino tuvo déficit de RD$12,4 millones en 2022
Niverka Núñez coloca un balón en el partido contra Croacia durante el Campeonato del Mundo de 2022. (FIVB)
Cuando a Cristóbal Marte se le pregunta, tras cada éxito de las Reinas del Caribe, qué condiciones tienen que darse para que el equipo dé el siguiente paso y trepe al podio en Mundiales y Juegos Olímpicos la respuesta suele ser la misma; más inversión económica.
Marte, presidente del Proyecto Nacional de Voleibol Femenino, envió a DL el más reciente informe financiero anual, correspondiente a 2022, y los resultados finales arrojan un déficit de RD$12,4 millones. Se trata de una auditoría externa que ha realizado por 27 años en fila (desde 1995).
El programa, que comprende desde las categorías formativas hasta la adulta, tuvo ingresos por RD$45,635,663.
El Ministerio de Deportes y Recreación (Miderec) fue el principal soporte (RD$12 MM), seguido por la Federación Internacional de Voleibol (RD$9,7 MM), los aportes directos de Marte (RD$9,2 MM) y los avales que pagaron los clubes internacionales por el fichaje de jugadoras (RD$7,9 MM).
El año pasado, hubo 24 contratos de jugadores en países como Indonesia, Kazajistán, Perú, Francia o Brasil que dejaron aportes al programa por US$142,500. Por el fichaje de cada jugadora el club foráneo debe pagar a la Federación entre US$250,000 y US$10,000. De ese dinero hay que hacer un giro al club de origen en el país y otra parte va al Proyecto.
Pero los gastos alcanzaron los RD$58,043,718 en un año donde el plantel de adultas tuvo sus mayores compromisos en el Mundial y la Liga de Naciones. Quedó pendiente por cobrar RD$1,158,249.
El pago de honorarios al cuerpo técnico, que incluye entrenadores y fisioterapeutas, consumió la mayor cantidad de recursos. Se destinaron RD$17,5 millones en este renglón. Markos Kwiek, el dirigente del equipo de mayores, cobró en diciembre US$20,000 por concepto de salario.
El renglón de gastos es seguido por la compra de boletos aéreos (RD$12,1 MM), viáticos a atletas, entrenadores y personal de apoyo (RD$5,6 MM), pagos a clubes que formaron a las jugadoras (RD$3,9 MM), compra de ropas y calzados (RD$3,3 MM) y alimentación (RD$2,7 MM).
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