Sí a la venta del Chelsea
Hay acuerdo. Después de semanas de incertidumbre en torno al futuro del Chelsea FC, el gobierno británico ha aceptado con su expropietario, el magnate ruso Roman Abramovich, los términos legales de la venta del equipo, que pasará a manos del empresario norteamericano Todd Boehly y su consorcio empresarial, como adelanta la cadena Sky.
Durante las dos últimas décadas, Abramovich financió con más de 2.000 millones de euros al Chelsea, y pese a que el exdueño había informado que no exigiría la devolución de la deuda, en el gabinete de Boris Johnson existía preocupación y se temía que el magnate ruso incumpliera su promesa de renunciar a los préstamos.
Sin embargo, según la misma información de Sky, Abramovich y sus asesores confían en que su última propuesta para deshacerse del club será aceptada por Downing Street. Un paso muy significativo porque el del gobierno era el último escollo para la venta del Chelsea, que ya contaba con la luz verde de la Premier League, tal y como informaba The Telegraph esta misma semana.
Antes de comprar el equipo inglés, Boehly debía superar el «owners’ and directors’ test», una prueba que en español significa «el test a nuevos propietarios» y en la que la liga inglesa analiza si el candidato a adquirir un club tiene algún impedimento legal para hacerlo.