Alcaraz contra el campeón

Reto tras reto. Así avanza, a pasos agigantados, Carlos Alcaraz en el Mutua Madrid Open y en su incipiente y ya brillante carrera. El viernes venció al ganador del 21 Grand Slams, Rafa Nadal. El sábado, al número uno del mundo, Novak Djokovic. Y este domingo (18:30, La 1 y #Vamos) tratará de superar por primera vez a Alexander Zverev, vigente campeón del torneo y vencedor también en 2018, al que aún no ha logrado ganar (0-2).

El desafío para el español es grande, además, porque el hamburgués no ha perdido nunca en el estadio Manolo Santana. Su racha balance en el torneo es 19-2, pero esas dos derrotas fueron en otras pistas. «Es mi cancha favorita, la Caja Mágica es la mejor del mundo. Llegué al torneo jugando mal, sin mucha confianza, sin ganar muchos partidos, pero esta pista saca algo de mí. Esta ha sido la pista de Rafa durante los últimos 15 años, y ahora va a ser la pista de Carlos durante los próximos 15 años. Espero causarle problemas y poder ganar mañana».

Zverev parece otro. Su ética de trabajo ha mejorado mucho, sobre desde que trabajó con David Ferrer y ahora que se relaciona con Sergi Bruguera, que ahora es su entrenador de manera estable. El sábado, ya domingo, tras ganar a Tsitsipas, sorprendió al decir lo que iba a hacer en un partido que terminó pasadas la una de la madrugada. «Ahora, probablemente me iré a entrenar cuando termine con las entrevistas. Haré algunos saques, como ayer, antes de acostarme, pero estoy feliz de hacerlo tarde, porque significa que gano y estoy en la final», dijo Sascha.

Celebración modesta

Alcaraz celebró moderadamente su triunfo con la familia y su equipo y se concentró para preparar el duelo que puede darle el quinto título de su carrera, segundo de un Masters 1.000. Se entrenará antes del partido, sobre las 13:00, en la central. Con la mente puesta en derribar otra barrera, contra un rival al que no ha podido superar aún. Zverev alucina con él: «Nada me ha sorprendido de estos dos últimos días, sé lo bueno que es. En Acapulco el año pasado dije que en 2023 sería top-10, pero me ha ganado por un año. Es un jugador increíble, con 19 años parece un adulto, no tiene límites. Mañana tengo el oponente más duro de toda la semana, por eso voy a seguir entrenando».

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