Relevo generacional

Carlos Alcaraz demostró este lunes en Indian Wells que ya no es futuro del tenis español, sino presente. Había vencido antes a cuatro tenistas de la Armada (Ramos (dos veces), Feliciano, Zapata y Munar) y pudo con un quinto, en esta ocasión de renombre y gran carrera: Roberto Bautista, ganador de 10 títulos, semifinalista en Wimbledon y cuartofinalista en Australia, campeón de la Copa Davis y ex top-10. «No me lo creo. El partido completo, creo que es una de mis mejores actuaciones», dijo el muchacho, que hasta en lo de vencer a compatriotas ilustres con precocidad se parece a Rafa Nadal. El murciano de 18 años se impuso con una autoridad insultante al castellonense de 33 (6-2 y 6-0 en 66 minutos) y se enfrentará el miércoles en octavos a Monfils, que sorprendió al número uno, Medvedev (4-6, 6-4 y 6-1). Será su primer enfrentamiento contra el excéntrico jugador frances de 35 años y 28º del ranking.

Carlos iguala su mejor resultado en un Masters 1.000 (alcanzó también la cuarta ronda en París-Bercy) y encadena ocho victorias con el título de Río en un balance de 10-1 en lo que va de año. Sólo le ha ganado Matteo Berrettini y lo hizo en el desempate del quinto set de su partido de tercera ronda del Open de Australia. Impresionante.

La superioridad de Alcaraz en el primer set fue tremenda. Rompió de entrada el saque de Bautista y volvió a hacerlo en el quinto juego con una efectividad absoluta (2/2). Solo tuvo que defender un punto de break que salvó en el 2-0. Perdió dos tantos con primeros servicios (14/16) y sumó 16 golpes ganadores y cuatro errores no forzados (acabó con 30 y nueve). Con esos números fue una pared imposible de escalar para su rival, que no pudo hacer un mejor uso de su famosa consistencia.

Rosco inevitable

Parecía difícil que Charly jugara mejor aún. Pero ocurrió y eso destrozó a Roberto, que se vio con un demoledor 5-0 en contra y no pudo evitar el rosco. El chico le frió a dejadas, se manejó con potencia cuando fue necesario tanto de drive como de revés, mostró algún golpe magistral y no tuvo ni un despiste más allá de un par de dobles faltas que no tuvieron consecuencias. Fue un poco triste ver a Bautista tan abatido ante el chaparrón que le caía y, seguramente, no se merecía. Aunque la realidad es que Alcaraz, que aplaudió a su paisano cuando este abandonó la pista cabizbajo, ya es mejor que la mayor parte de los oponentes a los que se enfrenta y ha ganado cuatro veces a tenistas del top-10. Es muy difícil pararlo cuando entra en trance y tiene una disciplina ejemplar. Todo eso con 18 años. Imagínense lo que puede hacer este prodigio en el futuro.

Resultados del Masters 1.000 de Indian Wells.