«Siento que estuve a la sombra de Sainz»

Mejores amigos en el paddock, pero máximos rivales en pista. Parecía imposible ver una pareja así en un Mundial tan competido como la Fórmula 1, pero Carlos Sainz y Lando Norris llevan años demostrando que es posible. Toda la rivalidad se queda en el asfalto y, tras ello, siempre hay tiempo para las risas y las muchas anécdotas que surgen de ir viajando por todo el mundo durante el año. Sin embargo, pese a los buenos momentos, a veces también se pasa por malas rachas. No en cuanto a su relación de amistad, porque siempre se ha mantenido intacta, pero el británico ha llegado a reconocer que su boom dentro del garaje de McLaren no llegó hasta la salida del español hacia Ferrari.

Fue entonces cuando Norris certificó su gran ascenso dentro del box naranja. Pese a que su segundo año en la marca «ya fue bueno», la gran revelación no llegó hasta este pasado 2021, donde se ha subido al podio hasta en cuatro ocasiones. Ni la entrada de Daniel Ricciardo ha podido impedir el gran golpe que el joven británico buscaba ya con Sainz como compañero. «Creo que Carlos es uno de los mejores pilotos de la Fórmula 1. Hizo parecer que yo no era tan bueno, por el hecho de que él es extremadamente bueno y ha hecho un muy buen trabajo», revela Lando en una entrevista con ‘Autosport’.

«Siento que estuve en su sombra… porque él estaba haciendo un trabajo excepcional», añade el británico, incluso sintiendo que su evolución el pasado 2020 ya era para admirar. Pero, con el madrileño ya en Ferrari y un nuevo compañero de equipo en McLaren, Norris no dudó en coger las riendas de la escudería. «Este año he dado un nuevo paso hacia delante, que creo que es estar a su nivel (de Sainz) o quizá un poco mejor. Con Carlos, muchos no saben de lo que es capaz, ya que ha estado en Toro Rosso, Renault o McLaren. Ahora, más y más gente se ha dado cuenta de lo que es capaz», reconoce Norris, con gran admiración hacia su amigo.

Y, sobre su papel en el equipo ya como primer piloto, Lando Norris dice que no se acobardó con la entrada del australiano, incluso siendo un piloto mucho más experimentado que el joven de 22 años. La confianza en sí mismo y en todo su trabajo le hizo ganar la plaza que ya ocupa en McLaren: «Siempre he tenido la motivación de querer derrotar a Carlos. Con Daniel, no me sentí nervioso en ningún momento cuando llegó a McLaren como mi compañero de equipo. Mucha gente me preguntaba sobre ello, por el hecho de que ya había ganado un buen número de carreras. Todos sabían de lo que era capaz por haber estado en un coche ganador».