Un centenario Sterling mantiene al City en la cima

Tiró de paciencia el equipo de Pep Guardiola para imponerse a un equipo que llegaba con la lección aprendida y mantener el liderato de la Premier League. Hizo su partido el Wolverhampton Wanderers. Especialmente en el primer tiempo. Los de Bruno Lage venían de contener al Liverpool en Molineux. Un equipo que acumulaba 18 partidos seguidos marcando dos goles o más solo pudo ganar con un tanto in extremis de Divock Origi. Repitieron plan en el Etihad Stadium los lobos, y funcionó durante 45 minutos. Bernardo Silva y João Cancelo insistieron en hacer ver que son los dos futbolistas más en forma de los celestes, pero sus disparos desde lejos no pusieron en apuros a José Sá. Dos parones, uno para atender a Rúben Neves y Max Kilman, que chocaron tratando de despejar un balón, y otro para que Romain Saïss recibiera asistencia después de que Sterling le metiese un dedo en el ojo fortuitamente, redujeron el ritmo del partido. Pasaba poco, que era lo que a los visitantes les interesaba. Hasta que pasó. Ocurrió que en el descuento del primer tiempo Raúl Jiménez vio dos cartulinas amarillas en menos de un minuto. Hizo una falta sobre Rodrigo y luego no dejó al madrileño sacar la misma.

Tras el descanso, el Manchester City dio un paso adelante. Progresivamente fueron creando más ocasiones y cada vez más claras. Como el cabezazo de Ilkay Gündogan que superó a José Sá en el minuto 54 y que tuvo que sacar Conor Coady sobre la línea. Defendió con todo el Wolverhampton Wanderers. Congestionó su área con cinco defensores, y con otros tres futbolistas en la frontal para tapar pasillos. Adama Traoré se quedó solo tratando de cazar algún balón en largo, pero no tuvo opciones. Bernardo, que jugó de mediocentro, mediapunta y de extremo, provocó la pena máxima con la que los celestes dieron el primer golpe. Un centro suyo lo tapó João Moutinho con el sobaco… o quizá fue el costado o el brazo. John Moss dudó menos y señaló penalti, y el VAR no encontró motivo para contradecir la decisión del colegiado. Valió. Raheem Sterling abrió la lata con un pase suave y raso a la red mientras Sá se lanzaba a un costado. El jugador de 27 años alcanzó así el centenar de goles en la Premier League. Abierta la veda, siguieron llegando más ocasiones. Kilman tuvo una más, en la otra portería. Un cabezazo suyo en el descuento metió el miedo en el cuerpo de la parroquia local, pero Ederson atrapó seguro. El brasileño también se convirtió en centenario. Ha dejado su meta a cero en cien de los 212 partidos en los que ha defendido la meta citizen.

About The Author

administrador

See author's posts