El culebrón Emery, cerca del final: «Fernando, me quedo»

Las palabras de Unai Emery tras el partido contra el Young Boys respecto al interés del Newcastle sonaron a despedida. O al menos sonarían así en el 99% de los profesionales del fútbol. Pero a Unai hay que encasillarlo en el ese 1% que es diferente. Emery, ha decidido quedarse en el Villarreal. Y así se lo transmitió anoche a Fernando Roig padre e hijo, con los que conversó tras el partido, antes y después de su rueda de prensa. «Fernando, me quedo», le llegó a decir el de Hondarriba al consejero delegado. Además, oficializando el acuerdo con Fernando Roig, el técnico vasco ha publicado en la mañana de este miércoles una carta comunicando su compromiso con el Villarreal.

Emery quizás pecó de sincero y por ello sus palabras dieron lugar al enfado en parte del mundo amarillo, por aquello de que no cerró la puerta del Newcastle. Se esperaba un mensaje tajante, que zanjara la incertidumbre. Lo contrario se interpretaría como un deseo de marcharse. Pero no fue ni mucho menos contundente. «Sé que hay un interés y no he dicho que no», apuntó Emery. A su vez, indicaba que todavía no ha recibido una «oferta» y hablaba de «respeto» y «lealtad» al Villarreal. Curiosamente, su discurso se entendía como lo contrario, porque en el 99% de las veces cuando el protagonista dice hay interés lo que realmente están diciendo es que tienen un acuerdo cerrado o casi. Pero Unai, como decíamos, forma parte de ese otro 1%, del que peca por exceso de franqueza, por decir realmente lo que hay sin calcular las consecuencias y el transfondo que también tienen sus palabras, un error, porque da lugar a interpretaciones y prejuicios.

El Newcastle le tenía en mente, de hecho era su primer candidato, si bien, las partes no habían profundizado en una negociación. Precisamente, las informaciones difundidas desde las oficinas de Las Urracas fueron las que más contribuyeron a interpretar el mensaje de Emery como un adiós. O la suma de ellas y también de los discursos contradictorios de Emery, porque este afirmó el lunes que no sabía nada del club inglés y sin embargo el martes reconocía al menos el «interés». Así se ponía el colofón a un día en el que desde Inglaterra se había incluso publicado que el Newcastle pretendía que este sábado esté ya dirigiendo al equipo desde su banquillo. Pero parece que los nuevos dueños ingleses fueron más rápidos en pensamiento y con sus filtraciones que en sus hechos, dando por seguro que Emery, su elegido, no diría que no a su propuesta cuando se la presentasen.

La franqueza de Emery, por más que no tuviera nada cerrado con el Newcastle e inclusive esté más próximo a continuar que a irse, generó daños colaterales en el Villarreal, pero nada más lejos de la realidad, ya que el vasco seguirá a bordo del Submarino amarillo. El club, el vestuario, pasó la jornada de Champions sin saber si el conductor de su tren iba a seguir o iba a saltar en marcha a la llamada de un proyecto del que solo se sabe que tiene petrodólares. Quedó la sensación de que su decisión final dependería de la oferta que le presentase el Newcastle -si se la terminaba presentado-. Dicho de otra manera, aunque el proyecto del Villarreal le motivase, existía la posibilidad de que el otro le acabara gustando más. Así, por más que esa posibilidad, la de irse al Newcastle fuera según su entorno «remota», alteró y restó para el futuro fuerza a la relación Villarreal-Emery, porque igual que ahora no ha sido tajante ante el interés inglés, dejando a la entidad en un estado de dudas e indefensión ante el dinero del jeque a mitad de temporada -tras haberle hecho un equipo a su medida (Danjuma? Aurier, Estupiñán…)-, en cualquier otro momento sus dudas podrían volver. Ahora, con la emotiva carta que ha publicado el entrenador, esas dudas han sido sacudidas de una tacada. Emery seguirá al mando del proyecto de Roig.

Emery, que hoy cumple 50 años y recibió la felicitación en redes del Villarreal, ve la situación desde otro prisma. «Cualquiera puede recibir una oferta y valorar y agradecer que se interesen en el trabajo de uno», dijo el técnico de Hondarriba en sala de prensa. Y eso considera que ha hecho, agradecer a su manera al Newcastle que hayan llamado a su puerta, aunque su respuesta si le trasladan una oferta sería que «no». Emery, a día de hoy, prioriza el proyecto del Submarino. Forma parte de él y está más consolidado que el del Newcastle, que está por salir del horno. Pero Emery, que conoce el mundo de los jeques de su paso por el PSG, ha querido ser cortés con el interés y dejarse abierta una puerta para un futuro.

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