Muguruza se pone a 300

Había dudas lógicas acerca del rendimiento que podía ofrecer Garbiñe Muguruza en su vuelta a las pistas mes y medio después de jugar su último partido, el que perdió en la segunda ronda de Indian Wells ante la estadounidense Alison Riske. Fue el 12 de marzo. Después, renunció a competir en Miami alegando molestias en el hombro izquierdo. Pero lo cierto es que la española superó su primer compromiso en el Mutua Madrid Open, un torneo que se le da mal (sólo ha logrado seis victorias en ocho participaciones y no ha pasado de octavos), con solvencia y buenas sensaciones ante Ajla Tomljanovic: 7-5 y 6-2 en 1h36. Así sumó su victoria 300 en torneos WTA, una cifra considerable en diez años como profesional, y el domingo se enfrentará a la ucraniana Anhilina Kalinina, quien ha vencido a la estadounidense Sloane Stephens por 7-5 y 6-4.

«Me he encontrado bien, hace unos meses perdí contra ella y aquí he jugado mejor y mi táctica ha funcionado», dijo Garbiñe, que efectivamente había caído contra la australiana de 28 años y 38ª del mundo el año pasado en Indian Wells (el cara a cara está ahora igualado a tres triunfos). «Tenía que aceptar que iba a estar fuera de ritmo, pensar en la contrincante y no tanto en mí», añadió.

Muguruza tardó unos cuantos juegos en ajustar unos mecanismos un tanto oxidados. Tuvo problemas, sobre todo para levantar la pelota con el revés. Pero jugó siempre con mucha profundidad, a las líneas, y eso la permitió dominar el ritmo del partido en muchos momentos, ante una Tomljanovic que se defendía con la sensación de poder aprovechar la inactividad de su rival. De hecho, el primer set tuvo más color australiano que español tras un inicio con un quiebre por cabeza. Garbiñe aguantó el tipo y rompió para ponerse el 6-5 y consolidar la ventaja con su saque.

Final plácido

La segunda manga fue más plácida para ella, en parte por las molestias de Tomljanovic en el muslo izquierdo. Rompió para el 2-1, el 4-1 y el 5-2 después de perder su servicio por segunda vez. En esos minutos, los mejores de su tenis, se soltó, mostró lo que es capaz de hacer con su agresividad controlada. Cerró la victoria con un remate después de reírse cuando se coló la voz de una mujer por la megafonía de la pista Manolo Santana antes de un saque. «Estaba bastante nerviosa antes de salir, es el único torneo aquí y tengo la sensación de no querer defraudar al público. Nunca se me apoya así fuera y ahora me toca a mí devolver este apoyo», expresó a un público que la quiere y espera mucho de ella. Ojalá este sea su año en la Caja Mágica.

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