El Atlético es un clamor
El Atlético es un clamor. El equipo rojiblanco salió del Ciutat de Valencia tremendamente enfadado con la labor de González Fuertes en el Levante-Atlético y no ya sólo por el penalti señalado a Lodi en los minutos finales de encuentro. Un penalti que nadie entendió dentro del conjunto madrileño y que desató el enfado entre la afición rojiblanca. Una acción en la que el remate del jugador del Levante no va a portería y en la que ningún rival entendió que era merecedora de pena máxima. Nadie la había protestado.
Pero hay un dato que también trajo de cabeza al Atlético: el equipo de Simeone hizo 11 faltas y se marchó del estadio con seis tarjetas amarillas, una roja (a Simeone) y dos penaltis en contra. Hermoso y Felipe vieron ante el Levante amarilla en las tres primeras faltas que cometió el equipo rojiblanco en el encuentro.
Los rojiblancos claman también por las acciones de los rivales hacia João Félix, parado en falta una y otra vez por los jugadores del Levante. Los rojiblancos salieron del Ciutat indignados con la labor del colegiado. El Levante hizo 15 faltas y únicamente vio tres amarillas: Pepelu y la doble a Rober, la segunda ya con el partido acabado. Esa segunda fue por protestar.
La indignación atlética va creciendo cuando se mira la estadística general de LaLiga. El Atlético es el que menos faltas hace del campeonato: 117. Y el que más tarjetas amarillas ha visto: 36. Algo no cuadra en esa relación faltas-tarjetas y en el vestuario del Atlético están muy recelosos con ello. Los futbolistas que salieron a atender a los medios al término del encuentro ya mostraron su indignación en este sentido.
Simeone salió en rueda de prensa y comentó que prefiere no hablar, aunque la afición entiende que alguien tiene que salir a dar la cara y hablar sobre lo que está sucediendo en este inicio liguero. El Atlético no está fino, no acaba de sentenciar los partidos pero se siente perjudicado por la labor de los colegiados. Gil Manzano ya amargó la tarde a los rojiblancos en el Atlético-Athletic y González Fuertes la lió en el Ciutat.