El campeón, y su público, hoy regresan al Metropolitano

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La última vez era 7 de marzo y el mundo ya había cambiado para siempre, aunque aún no se fuera consciente. Aquella tarde, una de las últimas de la vida de antes, el Atlético empataba ante el Sevilla, en un Metropolitano lleno que una semana después se cerraba, como todos en casa, tratando de contener una pandemia que ha dejado tantas ausencias, mascarillas y vacunas, que convirtió sus 68.456 asientos, en un mar de sillas rojas, en las que se siguió disputando el fútbol, pero sin lo que le da el alma, su gente, su afición.

En aquel último partido en el que hubo, en la casa del Atleti, es curioso, Llorente era aún apenas nada, no había pasado Anfield, la última Liga del Atleti era de 2014. Hoy, un año, cinco meses y quince días después, guarda la última, la de 2021, en su museo y Llorente acaba de renovar como eso que grita el 14 a su espalda, leyenda. Hoy, un año, cinco meses y quince días después, 21.345 serán los afortunados primeros en volver, con distancia, mascarillas y restricciones, pero volver, el verbo que más ganas tenía de conjugar de nuevo el fútbol en este largo tiempo (sigue el partido en directo en As.com).

Ayer Simeone, como cada temporada, antes del primer partido en casa, se llevó a su chicos a ejercitarse por última vez allí, antes de recibir al Elche. Para que, entre otras cosas, nuevos como De Paul vayan acostumbrándose a sus márgenes. Salvo que en los partidos había rival, en el último año y medio no se han diferenciado demasiado de las sesiones, con las voces de unos a otros escuchándose por todas partes en el mar de sillas rojas. Hoy el público las tapará. Un público con mucho que celebrar ante esa foto: el Atleti ha sido campeón y ahí siguen los mismos. De este Atleti ya nadie quiere irse. Lo repite con orgullo el hombre de negro.

Kondogbia frente a la BBC

Un Simeone que piensa en Kondogbia para tapar el agujero de la roja a Hermoso en la 1ª jornada y seguir con su dibujo: tres hombres atrás. Su hueco, en el centro podría ocuparlo el nuevo, ese De Paul sobre el que está puesta tanta esperanza. Son los principales cambios que medita el Cholo en su once ante un Elche que funcionó ante el Athletic y eso puede hacer que Escribá repita. Con tres centrales y dos carrileros también, que tantos puntos y créditos le ha dado. Con clásicos como Fidel y Mojica, la llegada de Benedetto convierte su delantera en la BBC (con Boyé y Carrillo). Aunque, ante el campeón, el plan quizá sea estar bien replegadito atrás. Con el recuerdo de un penalti, el de Fidel al palo, que pudo haber cambiado la historia de LaLiga pasada, esa que ganó el Atlético y que 21.345 afortunados hoy no dejaran de aplaudir.

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